sábado, 23 de agosto de 2008

Dolorosa Trivialidad.















Ya no es que me duela
sólo es que me duele.
Un clima frío me quiebra lento,
como se quiebran ,a veces,
las manchas en el cielo.
Un silencio me aprieta el cuello,
la garganta, como un cinturón
a una función exigida.




Un dolor me aturde el alma,
mi corazón blanco,
como una flecha férvida.
Ya no me queda alimento,
ya no me queda habla.
Siento que soy el aire suspendido
y una Diana del centro cósmico
con volumen de gran extenso filo
me corta la mirada.
Se me hace sombría la materia,
sólo me quedan sus colores.






(BENJAMÍN LORCA)

4 comentarios:

MAR dijo...

Benjamín, mi poeta preferido, he leído lo de hoy y me ha encantado profundamente, es tan intensamente triste y bien sabes que vibro más cuando palpo tus melancòlicas palabras, pues siento que sincronizan con las mías de aspecto lúgubre que son las que yo más amo.
Ya el tìtulo es delirante y se percibe la dolorosa trivialidad que te aturde el alma y tu blanco corazón que se va llagando con pequeñas frustraciones...al menos te quedan colores. He ahí la esperanza.
Besos de Casiopea

Anónimo dijo...

Pues espero sinceramente que nunca se le destiñan esos colores, es un horror cuando no puedes sentir otra cosa más que dolor, cuando eso es lo único que hay.

Anna Bahena dijo...

"Un silencio me aprieta el cuello", cuando llego a un lugar y veo tangible, descrptible lo que siento en este momento...

asi es....

hermoso.

Anna.

dijo...

sensaciones terribles, para sentires tan fuertes.
Es bello leerte. Siempre.